Nicolás Pastore y Nicolás Garófalo intervinieron una increíble casona de 1927 y la transformaron en un elegante bar con el nombre del pasaje donde se ubica a ½ cuadra de Av. Santa Fe y del shopping Alto Palermo: ANASAGASTI. En esa zona del Alto Palermo no había nada, e inauguraron en junio de 2016 sorprendiendo por la elegancia de su casona, el ambiente íntimo que recuerda a los speakeasies, y su Alta Coctelería. Es que por su barra pasaron bartenders destacados como Matías Granata (premiado Mejor Bartender de Argentina 2014 por los Bar and Drinks Awards) y Agustín Giuliani (Mejor Bartender Revelación 2017, actual embajador de Chivas Regal). Incluso Anasagasti estuvo ternado como Mejor Bar de Argentina 2016, rubro principal ganado por Nicky Harrison.
Luego llegó la pandemia y como todos, debió cerrar. No reabrieron hasta hoy, debido a diferentes temas de mantenimiento de una verdadera joya arquitectónica, que les llevó más de un año de reformas en el piso sobre todo.El estilo francés está muy latente en la arquitectura de Buenos Aires pero son pocos los lugares que conservan la tradición y el espíritu de las casonas históricas edificadas en tiempos dorados de la aristocracia porteña. Aún sigue deslumbrado desde la entrada, con una pesada puerta de madera abriendo hacia un living de estilo inglés antiguo donde está el bar.
3 PISOS – 3 AMBIENTACIONES
Pero cada uno de los pisos de Anasagasti tiene un diseño diferente. En la planta baja predomina la madera original de la casa que es considerada patrimonio histórico y data del año 1927. A su vez, se mantienen otros detalles antiguos como las molduras, su imponente chimenea, los vitraux iluminados y la escalera principal. Esto combinado con una araña central y una barra de cobre dan un aire moderno y elegante.
Subiendo por ascensor al 1er piso, donde se abre un descanso y detrás un salón angosto en forma de 9. Allí todo es señorial, como si fuera un antiguo club de caballeros, con pisos y muebles de madera, empapelados con líneas geométricas, mesas de mármol y una araña central.
El 2do piso es el más descontracturado, donde un clima más verde se logra como un jardín de invierno del restaurante. Una pequeña barra, espacio acotado, luz muy tenue de velas, y un techo de vidrio que ocupa un tercio, se levanta cuando la noche lo amerita y le da un toque de apertura al cielo.
3 PISOS – 3 PROPUESTAS
Han pasado 3 largos años pero Anasagasti volvió a abrir sus puertas con una propuesta renovada, que se despliega en esta casona antigua de 3 plantas ¿La novedad? Una carta para cada piso.
En la PLANTA BAJA está el bar, con una carta de 12 cocktails de autor pensada por Juan Salazar (embajador de Gin Merle), y una carta de 8 tapas diseñadas para acompañarla.
Anasagasti siempre se destacó por su impronta en la coctelería y lo sigue manteniendo. Probamos varios cocteles, siendo los 2 primeros: KAVANAGH (vermut rosso, Campari macerado en pimienta, soda, bitter de especias, $arg 2300) en vaso largo, como reversión de un Americano, clásico italiano. Sorprende su excelente sabor, perfecto para el que recién llega.
Luego el TEATRO COLÓN (gin nacional, apricot brandy, tónica floral, bitter orange, cordial de lima, $2200), en copón como una reversión del gin Tonic.
En cuanto a las tapas, probamos las Alitas crocantes con crema de rocoto ($ 2800) servidas en un cono tipo fast food; las Croquetas de morcilla y pera ($ 2400); y las Empanaditas de remolacha, queso de cabra y cebolla caramel ($ 1900). Estas 2 últimas de exquisitos sabores.
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En el 1ER PISO el restaurante donde la comida ya va tomar forma, ya que están a punto de inaugurar. Tienen una treintena de vinos seleccionados de bodegas boutique, con una cava vidriada donde se puede ingresar a elegir.
La carta de comidas es breve, con foco en productos estacionales de altísima calidad. El pato al kamado, las pastas caseras rellenas con centolla y el pulpo español son algunos de los platos estrella. A su vez, ofrecen fuera de carta la sugerencia del chef que cambia con regularidad.
En el 2DO PISO la propuesta gastronómica no es tan sofisticada pero ahora es diferente a la del bar, no como pre-pandemia que eran la misma. La comida son clásicos reversionados con alguna técnica o ingrediente poco habitual.
De las 5 Entradas probamos la BURRATINA, con olivas, tomates secos, pesto y crocante de almendras y limón ($ 3100), de las mejores Burratas presentadas y de gran sabor.
De los 6 Principales probamos: MOLLEJAS AL KAMADO (con papas en doble cocción y limón marroquí, a $ 4200); y el WRAP DE PATO Confitado (con repollo colorado, rúcula, naranjas y barbacoa, a $ 4600). Mejor el 1ro, se disfrutaría más si la luz no es casi nula, solo se ven las sombras que provoca una pequeña vela.
La Hamburguesa de Jabalí con provoleta, Relish Casero y cebolla caramelizada, es otro plato tentador para la próxima visita.
De los 3 Postres, elegimos el MOUSSE DE CHOCOLATE con salsa de maracuyá y garrapiñada de almendras, a $ 2900. Otro plato excelentemente presentado y de sabor logrado.
La carta de cocktail aquí tienen 11 opciones y quisimos probar:
PLUMA NEGRA (vodka, apricot brandy, cordial de maracuyá clarificado, jugos cítricos, a $ 2300), en copón con una pluma negra de garnish, de perfil dulzón pero balanceado y atractivo.
CUERVO DE SANGRE (vino rosado, vermu a base de naranja dulce, sidra, mermelada de moras, pincelada de negroni, $3500), en copón con una jeringa para inyectar uno de los insumos (el vino?) y mezclarlo. El que menos nos gustó de todo lo probado.
AZTECA (tequila, jugó de ananá al kamado, miel de jengibre, cítrico, siriaicha, a $ 2600), viene en en recipiente tipo tiki de una cabeza abierta de indígena, con piel de piña encendida, y se toma con bombilla. Bastante rico.
V DE VENDETTA (Bourbon macerado en banana, licor crema Amarula, bitter de chocolate, a $ 2600), en copita Presidente, con una bananita bañada en chocolate que recuerda a la Dolca y forma de logo de Nike. Trago de perfil cremoso y sabroso, ideal para acompañar el postre.
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EN EL AFTER DINNER
La sobremesa o el after dinner fue de regreso en el bar, donde probamos 2 cocteles más: ZOOLÓGICO DE BS.AS. (blend de rones, apricot brandy, jugo de ananá asada, de zanahoria, de lima, perfume de naranjas amargas), servido en un recipiente exótico tipo tiki con forma de cabeza de felino.
Luego el HARRODS (whisky macerado en avellanas, Drambuie y humo de canela), presentado en una caja tipo regalo importante, que el bartender abre, se disipa el humo y allí está la copa Cognac tallada, una presentación lujosa y una garnish de laja de chocolate. Inmejorable! Sin duda este cocktail por sí solo amerita la visita, imaginen todo el resto que los va a deslumbrar.
Por último anuncian cursos de coctelería y en fechas especiales: catas de vino, ron y de whisky con especialistas.
ANASAGASTI BAR
Pje. Anasagasti 2067, Buenos Aires
Horario: todos los días 7pm-2am
Reservas: 11-6614-2833
Instagram: @anasagasti_ba – @voyatrassalazar
Prensa: Clara Peydro (clarap@grupomass.net)
